martes, 25 de octubre de 2022

ENCUENTRO CON ANTONIA CONTRERAS. VIII Ciclo “Las mujeres como transmisoras del flamenco”.

 


Vídeo completo del acto:  https://www.youtube.com/watch?v=pnRsKjrBVME

El viernes 21  de octubre inaugurábamos el curso 2022/2023 con la primera actividad de nuestro VIII Ciclo “Las mujeres como transmisoras del flamenco” en la Peña Flamenca de la UPO. Volvíamos después de tres años al salón de actos del CABD, que tan amablemente esta institución nos ha cedido siempre y a la que le estamos eternamente agradecidos por ello, ya que después de diez años celebrando actos  en el mismo, lo consideramos nuestro pequeño templo del flamenco dentro de la Universidad .


Este acto se realizaba conjuntamente con el Instituto Andaluz de Flamenco (AAIICC) y el Servicio de Extensión Cultural del Vicerrectorado de Cultura y Políticas Sociales de la UPO y fue retrasmitido en streaming en nuestras redes sociales.

El encuentro comenzó con una entrevista realizada por nuestra compañera de junta directiva Ángeles Cruzado, doctora en comunicación y directora del blog “Flamencas por derecho”  (https://www.flamencasporderecho.com/).

Antonia Contreras  y Ángeles Cruzado

 Antonia fue muy generosa en todas sus respuestas, no rehuyó ninguna pregunta, afrontó de una manera muy audaz la situación del flamenco en la actualidad y mostró una cercanía, sinceridad y positivismo digno de admiración.

Antonia Contreras y Ángeles Cruzado

Comenzó hablándonos de sus comienzos, de cómo le llegó ese amor y esa pasión por el flamenco dentro de su entorno familiar y de cómo alejada en el campo en un entorno rural escuchaba esas músicas en un viejo aparato de radio que había en su hogar . 

 No había artistas en su familia y tampoco lo veían como algo bueno para ella. Pero lo tenía muy claro y aun a pesar de dejarlo durante una temporada, se dio cuenta de que era eso lo que quería y retomó su carrera, ganando la Lámpara Minera en 2016.

Antonia Contreras

Nos hablo de su vida, de su carrera, de sus experiencias con grandísimas orquestas sinfónicas con las que recorrió medio mundo, de sus discos, sobre todo del último porque lo tiene como una de sus creaciones más personales. En definitiva, Antonia nos abrió su corazón y compartió con todos los presentes su aventura en este mágico mundo del flamenco. Muchas gracias, Antonia, por ello y gracias también a nuestra compañera Ángeles Cruzado, que, como ya nos tiene acostumbrados, creó el ambiente idóneo para que la entrevista con Antonia fuera más una conversación entre amigas y compañeras de la que todos fuimos partícipes.

 Vino después el recital, acompañada a la guitarra de Juan Ramón Caro

Comenzó con un magnífico solo a la guitarra de Juan Ramón Caro, grandísimo guitarrista al que todos los presentes conocíamos y seguimos desde hace tiempo, por lo que también había muchas ganas de escucharlo. Juan Ramón es uno de los mejores guitarristas que ha dado este país, todo un referente en el acompañamiento con una técnica y limpieza espectaculares, y un amplísimo arco melódico cargado de recursos que se utilizan en los momentos justos y que sólo un gran guitarrista sabe hacer.

Juan Ramón Caro

Durante el recital, Antonia hizo cantiñas, farruca, malagueña del Canario más otra de creación personal acabada con jabegote y rondeña, soleá apolá, canción por bulerías y fandangos como remate, obligada por el público que, en pie, aplaudió  durante varios minutos con intensidad. Su último disco, "Singular Femenino", está hecho con letras de poemas de mujeres escritoras.

Antonia Contreras y Juan Ramón Caro

En cuanto al mismo, yo todavía estoy intentando asimilar lo que Antonia Contreras y Juan Ramón Caro nos dejaron en la ya otoñal tarde sevillana en la Universidad Pablo de Olavide.

Llevo ya algunos años en esto del flamenco, pero nunca había experimentado una situación en la que más de medio auditorio estuviera derramando lágrimas. Creía que era yo solo, pero al terminar Antonia la soleá apolá, se dirigió al público y nos dijo: "Por favor, no lloréis”. Yo ocupaba una de las primeras filas y, tras ese comentario de la artista, volví la cara hacia atrás y me di cuenta de que no era yo solo. Veía las lágrimas en casi toda la audiencia.

¿Cómo explicar esto? Antonia y Juan Ramón fueron poco a poco metiéndonos en una maravillosa burbuja donde los sentidos y las emociones terminaron por desbordarse y era materialmente imposible salirse fuera de ella.

Unas letras tan sabias, cortas, bellas y a su vez inéditas en los repertorios flamencos, que tocaron el corazón como puñales. Unas hechas por ellos y otras elegidas de grandísimas poetas durante la pandemia que nos encerró en la más profunda de las oscuridades y que nos volvieron a recordar aquello que nuestras mentes quieren olvidar por completo, pero tan cierto es lo que pasó, como cierto es que recordarlo bajo una voz flamenca y una guitarra de embrujo traería estas consecuencias.

En resumen, Antonia hizo lo que solo una gran artista puede hacer, ponerte las emociones a flor de piel y todo bajo el más genuino lenguaje flamenco que tiene como última meta tocarte el alma. ¡Y vaya si lo consiguió!

El flamenco no es algo encasillado, se aleja de ser cualquier minúsculo satélite de algún tipo de música, arte o expresión cultural; es más, ni siquiera lo podemos considerar como un planeta cultural al uso. El flamenco en un universo, un maravilloso universo donde las emociones humanas se expresan mejor que en ninguna parte, a mi modesto entender.

Eso es lo que Antonia y Juan Ramón hicieron el pasado viernes en la Universidad Pablo de Olavide: encendernos las emociones, descubrirnos que el flamenco sigue ahí, que tiene esa maravillosa capacidad y generosidad de acoger en su seno sólo aquello que tenga una calidad inmensa, donde no cabe la vulgaridad ni la mediocridad.

Todos nos preguntamos por qué esta genial artista, ganadora de una Lámpara Minera, que ha recorrido el mundo varias veces, ya sea con las mejores orquestas sinfónicas o con los mejores cuadros del momento, no está presente en los habituales circuitos flamencos

Francisco García, Juan Ramón Caro, Antonia Contreras, Ángeles Cruzado, Rafael Cáceres.

Continuamos la tarde con nuestro tradicional encuentro en la sede de la Peña, encuentro que llevábamos sin hacer tres años y que parecía imposible que se volviera a repetir. Allí, con una cervecita en la mano y con las ricas viandas que los socios aportaron, pudimos continuar disfrutando de Antonia y Juan Ramón, que tuvieron la gentileza de acompañarnos hasta el límite de la hora de cierre de la Universidad. Si con el recital ya estábamos más que satisfechos, el poder compartir conversaciones con ellos y con todos los amigos que allí nos encontrábamos fue una auténtica maravilla, y pudimos comprobar no solo lo grandísimo de su arte sino también su excepcional calidad humana. Fue una extraordinaria velada que tampoco olvidaremos y por la que también les estaremos agradecidos, por honrarnos con su presencia y con el regalo a la Peña de su último disco, “Singular Femenino”, que muchos de los socios también pudieron conseguir.


Momentos del encuentro posterior en el Local de la Peña.

Qué maravillosa visita después de tres años sin flamenco cara a cara en nuestro querido salón del CABD de la UPO, donde tan buenos momentos hemos vivido. ¡Gracias, Antonia y gracias Juan Ramón! Nunca vamos a olvidar vuestro paso por aquí y, aunque parezca un tópico decir que sois tan buenas personas como artistas, lo diré a boca llena y lo pregonaré a los cuatro vientos, igual que ya lo están haciendo todas las personas que ayer asistimos a ese encuentro.

Francisco García

Presidente